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¿QUÉ HACÍAMOS CUANDO NO EXISTÍA EL INTERNET?

Hoy en el día de Internet, o más bien en el Día Mundial de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (nombrado así por la ONU) recordamos qué hacíamos antes del internet, Facebook, Whatsapp, Snapchat…

Las generaciones que crecimos junto con el desarrollo de la tecnología todavía tenemos el recuerdo de aquellas tardes en las que salir de casa a jugar con los vecinos era la mejor manera de divertirse. No existían “selfies”, “snaps” ni “check ins”.

Pero, ¿qué hacíamos para divertirnos?

1. AL LLEGAR DEL COLEGIO PODÍAMOS PASAR HORAS HABLANDO POR TELÉFONO FIJO ( NO CELULAR), MIENTRAS MIRABAMOS ALGÚN CANAL DE MÚSICA.

2. PERO ANTES DE SALIR TENÍAMOS QUE “ECHARNOS UN CLAVADO” A LAS ENCICLOPEDÍAS QUE MAMÁ HABÍA COMPRADO A UN SEÑOR DE CORBATA QUE HABÍA TOCADO NUESTRA PUERTA, PARA PODER HACER LA TAREA. ERA COMO NUESTRO WIKIPEDIA VERSIÓN ANÁLOGA.

3. Si contabas con una computadora podías darte el lujo de instalar el Microsoft Encarta y consultar tus tareas de manera más fácil por el ordenador… sin internet.

4. Y después de tanta enciclopedia pesada, bibliografías y cartulinas tu mamá te dejaba salir a jugar con tus amigos de la cuadra ¡yey!

5. NO HABÍA MAYOR FELICIDAD QUE ESCUCHAR A “JUANITO” TOCAR TU PUERTA Y ESCUCHAR EL TREMENDO GRITO CON LAS SIGUIENTES PALABRAS: “VAS A SAAAALIR A JUGAAAAR”. OBVIAMENTE TU MIRADA DE BORREGO SE GIRABA CON TU MAMÁ PARA PODER RESPONDER A LA INVITACIÓN. ¿TAZOS? ¿TROMPO? ¿A LAS ESCONDIDAS? ¿EL AVIONCITO? CUALQUIER JUEGO ERA PERFECTO PARA PASAR LAS TARDES.

6. ¿Alguien recuerda esta imagen? Junto con el solitario podías pasar pegado frente al monitor horas tratando de obtener la mayor puntuación.

7. Después llegaron los videojuegos, Nintendo, un tamagochi, el famoso multigame, en caso de no tener algún juego podías darte una reta de Mortal Kombat en la tiendita de la esquina (cuando tu mamá te mandaba por las tortillas).

Probablemente para la generación Z, ésto suene como una pesadilla. El mundo actual no se imagina, nisiquiera puede contemplar realizar sus actividades diarias sin internet. ¿Cómo que no existía Spotify? ¿Y Snapchat? Tal vez no gozabamos de la mejor tecnología pero puede que nuestras relaciones personales fueron más plenas y reales, en lugar de comunicarnos por medio de emojis.