Los rescoldos del PRI…
En el desconcierto del priismo regional, -con todo y que falta la definición del CEN del PRI-, dos personajes encabezan las preferencias en la disputa del CDE del PRI de Tamaulipas: Edgar Melhem Salinas y Alejandro Guevara Cobos.
Luego de la incursión del fallido candidato a la gubernatura, Baltasar Hinojosa Ochoa, por la entidad agradeciendo el apoyo popular a su proyecto, anunció una gira por el estado Guevara Cobos con el objetivo de “informar sobre la encuesta que realizó hace meses sobre el tema de la seguridad”.
Melhem Salinas, ha sido más discreto: apuesta a su amigo Hinojosa Ochoa para llegar al liderazgo estatal del tricolor.
¿Tienen futuro esos cuadros priistas en un escenario de resquebrajamiento tricolor por todo el país?..
¿Podrán sacar al PRI de la crisis estructural en la cual sus correligionarios la han sumido con tanto exceso y tanta pifia?..
Se ve muy complicado.
Hace unos días, se reunieron media docena de ex dirigentes del PRI tamaulipeco, para reflexionar sobre las tareas de su partido ante el reto de la alternancia y de su nuevo rol como partido opositor.
Hubo optimismo desbordado.
La mayoría, cree que se puede rehabilitar a un partido que parece no dar para más.
Algunos, lo ven con los ojos de una franquicia que todavía se puede estirar un tiempo.
Tanto Guevara como Melhem, no tienen el ojo en el PRI. Más bien, ambos, tienen la vista en la Senaduría del 2018 que daría vitaminas a sus carreras políticas y los pondría en la final para buscar la gubernatura próxima.
El riobravense, la tiene más complicada: su jefe político Baltazar Hinojosa, se anda moviendo para ser él el candidato a Senador. Y relanzarse en el escenario tamaulipeco reinventándose como un líder de oposición responsable.
Guevara les lleva ventaja.
La competencia entre Balta y Edgar, necesariamente los debilita mutuamente.
El mantense, se presenta como el que pudo haber evitado el descalabro de Balta. Y de hecho, en un análisis contrafactual, es lo que piensan buena parte de los priistas. Al menos, consideran que hubiera hecho mejor papel en la contienda que el matamorense.
En la sociedad rural, en tiempos de crisis, los asientos del café –los residuos del grano- eran recalentados para producir de nueva cuenta la bebida, aunque con menor potencia y sabor.
Así se ve el priismo tamaulipeco: buscando desesperadamente los rescoldos, para reciclarlos…