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Los que faltaban… los aviadores

Al llegar al poder tamaulipeco en 2016, los vientos del cambio prometieron acabar con las viejas, arcaicas y viciosas mañas del priismo hecho gobierno.

Sin embargo, como suele suceder, las promesas de Cabeza de Vaca y de Acción Nacional se las llevó el aire, quedaron en el olvido, relegadas en la historia de las contiendas electorales y los ascensos a la toma de decisiones.

Uno de los vicios del Revolucionario Institucional a lo largo de las 8 décadas y media en las que gobernó Tamaulipas fue la aparición de ‘aviadores’ en la nómina.

Los ‘aviadores’ son personas que nunca van a trabajar al área o dependencia asignada, pero cobran con puntualidad sus quincenas.

Algunos ‘aviadores’ son familiares, amigos, compadres o comadres (o vaya usted a saber qué más) del gobernante en turno.

Por decisión del ‘mero picudo’ (alcalde, secretario, tesorero, gobernador, presidente), ‘el aviador’ cobra como si trabajara, aunque en realidad se dedique a otra cosa en la vida.

Otros ‘aviadores’ simple y sencillamente no existen. ¿Cómo es eso? Sí, son nombres ‘inventados’ en las nóminas y, por lo regular, el jefe en turno, un director, gerente o alguien de más arriba, se queda con la lana.

Esa era una costumbre muy arraigada en los gobiernos tamaulipecos del pasado, una tradición entre la clase política de Ciudad Victoria.

Contra esa arcaica maña de la burocracia estatal, Cabeza de Vaca y el PAN prometieron luchar y, sobre todo, erradicarla. Pero… sucedió todo lo contrario. La adoptaron, la hicieron suya, la convirtieron en un instrumento para colocar a sus consentidos (familiares, amigos, cuates, compadres, comadres y demás).

Como parte del proceso de entrega recepción que se realizó, aunque los cabecistas nunca quisieron participar en los trámites, la Secretaría de Administración del nuevo gobierno estatal de la Cuarta Transformación ha identificado, hasta el momento, a 79 aviadores.

A esos casi 80 burócratas no los han encontrado por ningún lado, pese a que han sido citados. Ninguno respondió, nadie contestó.

Luego de una profunda revisión aplicada por la dirección general de recursos humanos, esos casos se han presentado en varias dependencias de las siguientes ciudades del estado: Tampico, Madero, Altamira, Aldama, Victoria, Reynosa y Nuevo Laredo.

Es decir, es una revisión o una investigación que todavía no ha terminado. Faltan muchos municipios y esperan encontrar casos similares, personas que, sin trabajar, cobraban un sueldo quincenal y las prestaciones de ley.

La Secretaría de Administración, a cargo de Jesús Lavín, continuará con la labor de encontrar e identificar más ‘aviadores’ en la estructura laboral que dejaron los cabecistas en el gobierno estatal, una vieja maña proveniente del priismo pero que el panismo se negó a erradicar.

LA TRAYECTORIA DE PANCHO GONZÁLEZ, EL NUEVO GERENTE DE LA COMAPA ZONA CONURBADA

Cuando se reveló hace meses en esta columna el nombre de Pancho González como la carta fuerte para ocupar la gerencia general de la Comapa de la Zona Conurbada con el nuevo gobierno de la Cuarta Transformación, muchos lectores comenzaron a preguntar qué más se sabía del prospecto.

Desde hace una semana, con la bendición del doctor Américo Villarreal, está a cargo de la principal dependencia del gobierno estatal en la zona sur.

Francisco José González Casanova es su nombre completo. En su círculo cercano lo conocen como Pancho, Pancho González.

Es un profesional: estudió la licenciatura en Comercio Internacional con especialidad en Agronegocios en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), en el campus Monterrey, en Nuevo León.

Cuenta con una Maestría en Administración y Políticas Públicas por el Instituto de Educación Ejecutiva.

Además, tomó un curso de Economía Política y Sociedades de Europa Oriental, en el Instituto de Estudios de Negocios de Moscú, en Rusia.

Otro curso que tiene en su trayectoria académica es sobre Administración Avanzada y Emprendedores, en Tulane University, una reconocida universidad privada de Nueva Orleans, en Luisiana, Estados Unidos.

En el servicio público, tal como se apuntó en este espacio en su momento, Francisco González Casanova estuvo a cargo de la delegación de la Secretaría de Gobernación en Sinaloa.

Un puesto de importancia que manejó fue administrador de la Aduana de Colombia, en Nuevo León, dependencia del Servicio de Administración Tributaria (SAT).

Antes fue director general adjunto de operaciones de AGROASEMEX, que es una institución nacional de seguros que se dedica a proteger la capacidad productiva del sector rural.

En el sector privado, fue accionista y gerente general de Comercializadora e Importadora del Noreste S.A. de C.V.

Él es Francisco González Casanova, un hombre que vive en Tampico y que conoce a la perfección la dinámica región sur de Tamaulipas.

LAS POSADAS DE CHUCHO NADER

Como ya es una tradición en su gobierno, Chucho Nader lleva las posadas navideñas a los sectores populares de Tampico.

De esa forma, miles de ciudadanos han disfrutado de las piñatas, los dulces y los regalos de la temporada en La Borreguera, Infonavit, López Portillo, Nuevo Aeropuerto y Enrique Cárdenas, entre otras colonias.

Algo más destaca: la asistencia de la gente al Recinto Ferial donde se instalaron los juegos mecánicos y donde se encuentra el pino navideño. Buen punto del Ayuntamiento porteño.

Y PARA CERRAR…

Sobre el tema de los ‘aviadores’ cabecistas, la Secretaría de Administración debería checar a fondo lo que sucedió en la Oficina Fiscal de Ciudad Madero con una titular cuyo nombre nadie recuerda por gris y mediocre.

Es muy posible que ahí, en la nómina del pasado inmediato, encuentren las huellas dactilares de un personajito inculto e ignorante, vulgar fabricante de noticias falsas.