LeBron James y los Cavs, a la final tras superar las 30 victorias de Jordan en playoffs
Ya es algo habitual escribir estas líneas: LeBron James jugará la final de la Conferencia Este. Es la novena vez en su carrera que llega hasta este punto de la temporada, la séptima seguida. Desde que en 2011 fichase por Miami Heat no ha parado. Cuatro en South Beach y ahora tres en los Cavaliers después de su I’m coming home de 2014. Y lo ha vuelto a hacer al barrer 4-0 a unos Toronto Raptors que hincaron la rodilla ante uno de los mejores jugadores de siempre. El equipo de Canadá estuvo mejor que en los tres partidos anteriores. Más serios, con algo más de fortuna en el tiro, pusieron en apuros a los Cavs a mediados del cuarto periodo. Pero nada. Se abrasaron frente a James e Irving. Ambos avanzan un peldaño más en esta postemporada en la que aún no conocen la derrota: 8-0 de parcial, 11-0 si sumamos las tres victorias que les dio el título el pasado año. Nadie había comenzado dos postemporadas seguidas de esa forma. Nadie desde los Lakers de 2001 había enlazado once triunfos seguidos. Estos son parte de los números, pero todavía hay más. Mucho más.
Porque con este triunfo, LeBron alcanza los 31 en unos playoffs, superando a Michael Jordan que se estancó en 30. Además, esta cerca de superar His Airness en puntos anotados: está a 140. Lleva acumulados 5.847 con los 35 (5/12 en triples, 50% en tiros de campo total) cosechados en este segundo duelo en Canadá. También se permitió 9 rebotes y 6 asistencias. Es el más grande en este lado del país. Wizards y Celtics deberán sangrar (y mucho) para quitarle la corona al Rey. Como intentó vagamente Toronto.
Los Raptors acaban, con esta derrota, una temporada que ha llegado hasta donde era lógico: LeBron y sus Cavaliers. Pero eso no quita que haya sido un final agridulce. Mal durante toda esta serie, ya tuvieron problemas para imponer su estilo frente a Indiana Pacers. No se les pedía el milagro, pero si algo más. Aunque no estuviera Lowry. Fueron un muñeco apaleado que se enfrenta a la disyuntiva de qué hacer ahora. Ibaka es la primera pregunta. Luego llegaría Valanciunas. El tándem Lowry-DeRozan… Cuestiones. Algo deberán hacer si quieren forzar a Cleveland porque con esto no les da. Son dos años derrotados por Lue y sus chicos. Y al menos en el primero, ganaron los dos partidos en el Norte.
A pesar de que todo era negro, Casey trató que los suyos se levantaran. Con el cuarto quinteto de esta eliminatoria, los Raptors dieron buenos zarpazos iniciales (21-10, min. 4:00). Sin embargo, cuando los Cavaliers golpean, son casi imparables. Parcial rápido para llegar al final del primer cuarto con empate a 28. James ya sumaba 10 puntos. Korver hizo de segunda unidad completa en el segundo cuarto. Desde el perímetro, el francotirador destrozaba: 16 tantos al descanso, 4/6 en triples, 47-61.
La rabia y el orgullo se abrieron paso por Canadá. P. J. Tucker realizaba una labor encomiable en la defensa sobre LeBron e Ibaka despertaba. Ya se acerca poco a la pintura, pero aprende cada año, un poquito más, a lanzar desde fuera. Firmó 23 tantos, uno más que DeRozan. Un 2+1 del hispanocongoleño daba la primera ventaja a los locales desde el cuarto inicial (93-92, min. 6:34). Y llegó el show de Irving. El base y su modo bailarín desintegraron la defensa de Joseph. Sus 11 tantos consecutivos, más un triple de LeBron, dieron jaque a los locales (95-106, min. 2:47). Fin a este serie. James descansa. Jugar 44 minutos de media sirven para estar una semana sin viajes ni partidos.