JUNTOS PODEMOS CAMBIAR SUEÑOS
A inicio de esta semana laboral que concluye hoy viernes, unos amigos me invitaron a tomar un café en céntrico restaurante de los llamadas comidas caceras, donde por cierto venden un café muy sabroso-EL RINCON-ubicado en el mercado ejidal, estaban solo tres amigos, mencionaré el nombre de dos, el ex alcalde Roberto Benet Ramos, y el excelentísimo profesor TOMÁS PEREZ JONAPAD, y un maestro del CBTIS al que solo ubico con el nombre del profesor Esteban Vázquez, y el tema que estaban abordando era precisamente, “como apoyar a jóvenes de escasos recursos en sus estudios”.
En la entrega de calificaciones del CBTIS 73, el profesor Estaban Vázquez dijo que le conmovió una ver la situación precaria de una madre de familia, prácticamente rindiéndose ya, al no poder pagar los más de 3400 pesos de inscripción para el próximo semestre, conmovido el profesor al escuchar la historia de dolor y de superación, le dijo el profesor, usted venga el próximo semestre, yo lo pagaré!”
Surgiendo una idea en esa mesa de parte de ROBERTO BENET Ramos, y del maestro Tomás Pérez Jonapad, “podemos juntarnos todos los amigos cercanos, que somos 25, y aportar 200 por semana, para ver de qué manera intentamos cambiar las vidas atribuladas de algunos niños, y ayudarlos a cambiar sueños! La respuesta de los ahí presentes fue unánime, y dijeron que trabajarían en ese rumbo.
Ahí platicando en la mesa, se habló de la importancia de apoyar a esos niños, para encausarlos por el camino del bien, pues de 200 pesos por semana, entre los primeros 25 amigos, lograrían reunir 5000.00 pesos semanales, con lo que fácilmente podemos-decían-darle a cada estudiante 150 pesos semanales, podríamos cambiar vidas! Es una tarea difícil si, pero no es imposible decían.
Retomando esa platica del lunes, hoy viernes sentado frente a mi computadora pienso, cuantos jóvenes dejaron sus estudios, por no tener sus padres el dinero mínimo para luchar por sus sueños, vemos también en los noticieros, cuantos jóvenes mueren masacrados al enrolarse lastimosamente en las filas del crimen organizado.
Cuánto dinero por ejemplo el municipio repartió en becas, Saben cuánto?.. Nada! Es una lástima, pero es cierto.
La educación desde el hogar, tiene errores, no digo que toda, pero una buena parte sí, porque los padres nos hemos olvidado de darles valores, de reforzarlos diariamente en esa enseñanza, nuestros hijos comienzan, robando un lápiz, los vemos que llegan con un tatuaje, vemos que el carácter les ha cambiado, poco a poco van ocurriendo circunstancias, que nosotros como padres, no vemos y cuando menos pensamos, ese tierno niño, ya trae una arma de fuego, deslumbrado por los dos mil o tres mil pesos que le prometieron, muchos de ellos, no alcanzan a cobrar una semana, mueren en cruentas batallas.
Esos jóvenes que vemos encarrilados en el crimen organizado, no nacieron con el rifle en las manos, no nacieron tatuados, no fueron inadaptados, pero por diversas circunstancias fueron marginados.
Cuando les vemos en las calles armados, en las noticias en medio de enorme charco de sangre abatidos, lo primero que pensamos es, se lo merecían!
Pocas veces pensamos y nos preguntamos, porque terminan así?
Creo que todos, podemos ayudar a que esto no ocurra, cuántas veces hemos visto jovencitos cargar pesadas mochilas, con zapatos viejos, con ropa maltratada producto del tiempo, y nunca nos acercamos a ellos a preguntar, te puedo ayudar en algo? Vamos! No somos capaces ni emplearlos en medios tiempos, para ayudarlos a que se sientan útiles, que no sientan que son dignos de lastima, sino todo lo contrario, que son capaces de lograr CONFIANZA en los demás.
El tema da para mucho más!
Pero hoy me gustaría dejar en sus corazones, la firme idea de que todos como sociedad, podemos organizarnos y ayudar a que un joven cristalice sus sueños, porque nosotros podemos ayudar a reconstruir el tejido social desde la misma raíz del problema, desde el seno familiar, primero cuidando a nuestros hijos, luego viendo a los demás, les parece? Intentemos cambiar para bien, la vida de uno de estos jóvenes… hasta mañana.