El romanticismo de la novia Delpozo
Fasiosas historias se relatan sobre al amor, algo que ha convertido a los más tímidos amantes en los más versados poetas, como alguna vez reconoció Voltaire.
Esta también es una sensación que se ha impregnado en las piezas de los más grandes artistas, como la última colección de novias de Delpozo, que se desliza etérea bajo la batuta de Josep Font.
Una que, si bien tiene al romance como tema central, se deja llevar por la armonía de la arquitecturasin quitarle protagonismo a la mujer detrás del vestido, tomando sus referentes de la naturaleza, de las técnicas de Alta Costura e invitando a una mujer fuerte y de espíritu indomable a acompañarse de sus creaciones en uno de los días más importantes de su vida a través de un perfecto equilibrio.
“Gracias a mi formación como arquitecto, descubrí la importancia de la proporción, particularmente en los volúmenes. Tiene que existir un equilibrio si lo que se busca es obtener una colección equilibrada”, relata Josep Font en exclusiva paraVogue.
En este atelier se aplican técnicas artesanales mientras se procura la innovación en el diseño, con algunos procesos tomados de la Alta Costura, así como otros del Ecole Lesage de París: “Su peculiaridad radica en que cada vestido cuenta con un carácter personal gracias a los elaborados bordados y sus aplicaciones. Al estar hechos a mano, no se puede conseguir una duplicación exacta como en las producciones industriales; eso es lo bello de la artesanía. Combinamos detalles orgánicos con telas enriquecidas con encajes, cintas de guipur, flores de lentejuelas o cristales”, señala.
Si existe algo que sea evidente en estas prendas, es que la mujer que inspira a Delpozo es una que no permite ser definida por un canon estético, sino por una actitud y personalidad que le permite adelantarse a sus tiempos; ella es una joya enigmáticade las que se contemplan una vez en la vida, por lo que no es de extrañar que nos inviten a compartir el infinito.
Saber crear (e innovar) colección tras colección es un reto que enfrentan los creativos de todas las casas, buscando piezas que embelesen y que si poseen una herencia, logren mantenerla vigente.
Pero, ¿de dónde proviene la inspiración de un día tan especial como uno en el que la mujer llega al altar? “En nuestra colección de novias hemos reinterpretado el universo de la maison pensando en la singularidad de cada mujer. Queríamos una colección cápsula atemporal y con lo más representativo de nosotros: modernidad, frescura y feminidad. Es por eso que las siluetas toman referencia de volúmenes y formas reconocibles; es el caso del uso de elementos característicos de la casa, como la organza o el tul de seda”, asevera el couturier de la casa, quien temporada tras temporada sorprende a una exigente clientela a la que le recuerda que la relación entre la arquitectura y la moda puede convertirse en un pincel mágico para convivir con la realidad, pero para la que lo escoge en ese día tan especial, le recuerda que “ella es la protagonista”; el vestido solo la acompaña para definir el marco del día y del momento. La novia debe ser ella misma con el vestido que haya elegido, esa es la verdadera clave detrás del look. Además, creo que cada elemento debe estar en armonía, pero de una forma muy natural.
Algo singular sobre su muestrario para esta temporada es la fusión de la delicadeza con la fortaleza femenina, los elogios de la silueta y el homenaje al amor, uno descrito por poetas, cantado por trovadores, pintado por magnánimos pinceles y bordado por Josep Font; uno tan sublime y único que enaltece la promesa más sagrada, que se cimenta a través de prendas que poseen identidad propia.
“En nuestra propuesta coexistensiluetas muy relajadas, formas muy fluidas y otros vestidos que ofrecen volúmenes acentuados a través de estructuradas faldas acampanadas. También he incluido unos culottes para las más atrevidas”, reitera. Mensajes e historias en todas sus formas nos dicen que nada es para siempre, argumento casi creíble cuando se trata de lidiar con una era en la que todo está a un desliz de ser desechado…
Y es en estas tinieblas de la duda donde aparece Josep Font con bocetos que cobran vida para ser dignos de un homenaje, exaltando un sentimiento que pocas veces vemos, esa emoción de encontrar a nuestra alma gemela, de saber que no es una opción dar por sentado semejante suerte, mereciendo ser celebrada en un majestuoso Delpozo.