El operador de la comunicación de la 4T
Antes de tomar posesión como coordinador de Comunicación Social y vocero del Gobierno de la República, Jesús Ramírez Cuevas concedió una entrevista a un programa de TVUNAM y explicó la transformación que registraría la comunicación política con la llegada de Andrés Manuel López Obrador a Palacio Nacional.
Desde entonces, Jesús Ramírez Cuevas planteó que la nueva comunicación gubernamental se distinguiría por estimular un debate abierto como una forma de construir la democracia participativa.
‘Creo que es el momento de discutir, de comentar, de argumentar y contraargumentar’, dijo en esa charla con el periodista Gabriel Sosa Plata.
Además, subrayó que se respetaría la libertad de expresión y que nunca más se iba a censurar, desde alguna oficina de gobierno, a un medio de comunicación, ni a un periodista.
‘No queremos una prensa dócil, queremos una libre deliberación’, comentó Ramírez Cuevas e insistió en que ‘el debate público es la mejor forma de construir ciudadanía’.
Esa entrevista, se reitera, se realizó cuando el sexenio de Enrique Peña Nieto estaba a punto de concluir y la Cuarta Transformación se alistaba a ser gobierno.
Como se observa, Jesús Ramírez Cuevas no mintió: desde antes, delineó exactamente lo que sería la comunicación gubernamental de la 4T, una comunicación multidireccional que estimula la discusión pública y que puso fin al monólogo que caracterizó a los sexenios anteriores.
A casi cinco años de que Andrés Manuel López Obrador ganó la presidencia de México con una victoria arrolladora en las urnas, esa perspectiva comunicacional se cumplió: el debate plural es una realidad. La discusión democrática es una práctica cotidiana.
Dentro de la pluralidad, algunas voces mediáticas disienten de la comunicación política gubernamental y, entre otras cosas, cuestionan ‘la Mañanera’ y, en particular, la réplica que ejerce ahí el presidente.
Sin embargo, disentir, discrepar, no estar de acuerdo es parte esencial de la democracia, es uno de sus elementos centrales.
Ese siempre fue el planteamiento de la 4T, esa fue la pauta establecida desde un inicio: la comunicación sería de ida y vuelta, en múltiples direcciones con el ascenso de la influencia de las redes sociales.
Jesús Ramírez Cuevas, efectivamente, es uno de los hombres del gabinete más cercanos al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Esa cercanía se ha fortalecido con la organización y la transmisión diaria de la exitosa conferencia ‘Mañanera’ desde Palacio Nacional. Sí, es exitosa, le duela a quien le duela… y les duele a muchos opositores.
Periodista, documentalista y escritor, Jesús Ramírez Cuevas, quien también es amigo del gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, es uno de los personajes clave para entender la operación diaria del gobierno federal de la Cuarta Transformación.
CONCLUYEN SU GESTIÓN LOS CÓNSULES DE EU EN MATAMOROS Y NUEVO LAREDO
El embajador de los Estados Unidos en México, Ken Salazar, realizó ayer en la residencia oficial una recepción en honor a los cónsules generales Eliza Al-Laham, Laura Biedebach, Eric Cohan, Ken Roy, Yolanda Parra y Deanna Kim, quienes concluyeron su gestión en nuestro país.
Yolanda Parra se desempeñó como Cónsul General de los Estados Unidos en Matamoros y Deanna Kim como Cónsul General en Nuevo Laredo.
Al evento asistieron tres políticos tamaulipecos, los tres de extracción morenista: la senadora Guadalupe Covarrubias Cervantes (que volvió a ser invitada por el embajador estadounidense Ken Salazar); la alcaldesa de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas; y el alcalde de Reynosa, el joven Carlos Peña Ortiz.
También estuvo un morenista destacado: Alfonso Durazo, gobernador de Sonora.
Su presencia se debió, suponemos, a que dos de los Cónsules Generales que se despidieron del país fueron Ken Roy (no, no es el personaje de la serie ‘Succession’ que se transmite por HBO), que estuvo en Hermosillo, Sonora; y Laura Biedebach, que estuvo en funciones en Nogales, municipio sonorense.
Otra senadora que asistió a la convivencia en la Embajada de los Estados Unidos fue Olga Sánchez Cordero, exsecretaria de Gobernación y exministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Kenia López Rabadán, senadora panista, también llegó a la cita en la despedida de quienes se desempeñaron como Cónsules Generales de Estados Unidos en distintas ciudades de México.
Y PARA CERRAR…
La encuesta publicada ayer por el periódico ‘El Universal’ confirma la tendencia en la carrera por la candidatura de Morena a la presidencia de la república: Claudia Sheinbaum se encuentra en el primer lugar.
Es un hecho: es Claudia.
Algo que no se debe perder de vista de los resultados del sondeo: Adán Augusto ocupa el último lugar, por debajo de Gerardo Fernández Noroña y Ricardo Monreal.
Eso es un duro mensaje para el secretario de Gobernación.