Columnas

El “Moyo” tenía razón

Catalejos

Opinión por Miguel Domínguez Flores

Quién iba a decir que al final de cuentas, el diputado Félix García tendría razón: no hay tanta prisa para que el Congreso del Estado discuta y apruebe la reforma que devolvería a la Secretaría de Seguridad Pública el control de la videovigilancia en Tamaulipas. Porque mientras ese día llega, ayer se registró una jugada en el tablero político del estado, que le dio una victoria significativa al Ejecutivo.

Los nombramientos entregados por Irving Barrios a Jorge Cuéllar Montoya como titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad, y a Miguel Gracia Riestra como nuevo Vicefiscal de Delitos de Alto Impacto, son en los hechos, la confirmación de que han empezado a caer los candados que puso la bancada panista a la Fiscalía General de Justicia.

Pronto sabremos si fue una ofrenda de paz del fiscal o el resultado de una negociación operada desde Palacio de Gobierno, pero ni duda cabe de que tanto Cuéllar Montoya como Gracia Riestra son perfiles que responden más a los intereses de la nueva administración, que al régimen cabecista.

Más claro: la destitución -disfrazada de renuncia voluntaria- de Silvia Maribel Pesina del Secretariado Ejecutivo interrumpe el control que pretendían mantener los emisarios de la anterior administración sobre asuntos tan importantes como el sistema de videovigilancia del estado.

El movimiento es muy favorable para el gobierno de Américo Villarreal si a eso se suma la llegada de Miguel Gracia Riestra a una posición clave de la Fiscalía General de Justicia. La vicefiscalía que ocupará tiene en sus manos ni más ni menos que el combate de los delitos que más afectan a Tamaulipas: el homicidio, el secuestro y la extorsión.

El exmagistrado del Supremo Tribunal (cuando llegó el cabecismo al poder, por elemental cortesía política dejó esa posición a pesar de que podía aspirar a otro periodo de seis años) es un personaje bien visto en Palacio de Gobierno y su labor en la Fiscalía no será meramente testimonial.

Como sean, los nombramientos de ayer no significan que se vaya a poner un freno a la estrategia legislativa para devolver a la Secretaría de Seguridad Pública sus facultades originales, pero sí deja claro que en paralelo a la operación parlamentaria, avanza un plan para que el Gobernador tenga en sus manos los hilos del poder que requiere.

Y en la hoja de ruta aparecen como prioridad los organismo operadores del agua.

PRI lleva mano

Ya no suena tan descabellado que el PRI imponga su principal condición para ir en alianza con el PAN, que sería el derecho de nombrar a un priísta como candidato.

Muy a pesar de sus terribles resultados en la elección pasada, las condiciones políticas
favorecen al tricolor porque tiene en sus manos un valioso elemento de negociación: dos votos en el Congreso.

Si la bancada de Acción Nacional insiste en frenar a toda costa algunas reformas como la de la Ley de Aguas, que quitaría el blindaje a la Comapa de la zona conurbada, necesita por fuerza el apoyo de Edgar Melhem y Alejandra Cárdenas.

¿Será tanto su amor por la gerencia de aquél organismo como para entregar la candidatura?

CATALEJOS se va de vacaciones. Nos leemos el 13 de diciembre.