Carmen Lilia Canturosas Villarreal eligió ser La Villana
En medio de una crisis de imagen, la presidenta municipal de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas Villarreal, eligió ser la villana al no brindar todo el apoyo a la pequeña de 4 años que falleció en días pasados por falta de recursos económicos para una cirugía.
Con todo respeto hacia la familia, hay cosas que duelen como sociedad, especialmente cuando las víctimas son los más vulnerables, aquellos que, por falta de recursos económicos, deben aceptar su destino ante un gobierno apático, insensible e indiferente al dolor ajeno.
En la vida, tenemos la oportunidad de elegir, y a veces podemos ser la villana o la heroína en la vida de alguien. Sin embargo, la presidenta municipal Carmen Lilia Canturosas Villarreal eligió ser la villana y, junto a ella, su hermana Claudette Canturosas Villarreal, presidenta del Patronato del Sistema DIF Municipal.
Es cierto que no tiene la obligación de ayudar, pero hay casos especiales en los que no importa cómo llegó una pequeña de bajos recursos a un hospital privado en espera de una cirugía. La familia intentó hacer todo lo posible por salvarla y tocó puertas en el ayuntamiento, donde le dieron “largas” para finalmente recibir la cantidad de 20 mil pesos cuando su deuda superaba los 140 mil pesos.
Cuando hay voluntad de hacer las cosas, todo es posible. ¿Por qué los regidores no hicieron colecta entre ellos? No gastan en gasolina para visitar las colonias; no se les ve trabajando. ¿Por qué actuaron igual que su alcaldesa en este caso? ¿Por qué tenemos un gobierno que se aleja de los lemas y principios de su partido, MORENA? Aquí no se priorizaron los pobres.
Ante la molestia de los neolaredenses, Carmen Lilia, en una junta de cabildo con el ‘palero’ número 1 de su cabildo, salió a “aclarar” la situación, pero ya no es necesario y además acusado a sus críticos de ser bots, Aquí aclaramos, somos neolaredenses, que toda la vida hemos vivido y trabajado en Nuevo Laredo, existimos y le exigimos que de la cara a los neolaredenses.
Y parafraseando a Carlos Enrique Cantú Rosas “El Chale Boy”, a la sombra de cuya memoria viven políticamente sus hijos. “No somos uno, no somos cien, no somos bots, Carmen Lilia, cuéntanos bien”.
Lo que queríamos, en su momento, era que saliera a dar la cara cuando se cerraron los OXXOs, que fuera al hospital a pagar la cuenta de una familia de bajos recursos. Ya no necesitamos explicaciones como sociedad; ya quedaste como LA VILLANA.