Columnas

Chavira quiere tener un partido, pero ajeno

Heriberto Ruiz Tijerina es uno de esos políticos excepcionales del PRI que no les gusta que la disciplina lo avasalle y lo convierta en un zombi o papanatas; por eso habla sin cortapisas, miedos ni temores a represalias. Decir sus verdades le ha dificultado escalar posiciones, pero allí está, en el Congreso local.

Ahora quiere convertirse en presidente estatal del PRI pero sin apelar a padrinazgos, apoyos cupulares o designios superiores, sino yendo al encuentro de las bases para devolverle a este partido la esencia de su origen, su cercanía con la gente, las banderas de la justicia social.

Heriberto asume la múltiple derrota del PRI en las elecciones locales del domingo 5 de junio pero como un reto para mejorar. No hay mal que por bien no venga, dice, y sostiene entrevistas con líderes y grupos, invitándolos a emprender un gigantesco movimiento de recuperación.

Lo dice abiertamente: el PRI estaba convertido en un club selecto de amigos, un grupo de poder que se repartía a tajadas los cargos públicos, los contratos de obra, los presupuestos, pero además, sin rendición de cuentas ni transparencia.

Esta actitud de Ruiz Tijerina no es de ahora; los archivos periodísticos están repletos de episodios suyos de denuncia, de queja, de advertencia, vertidos no en corrillos discretos, cafés o charlas de sobre-mesa, sino en eventos, públicos y privados, con la presencia de directivos partidistas, funcionarios gubernamentales.

Pero nunca le hicieron caso porque es más cómodo creer que las cosas seguirían iguales, inmutables, protegiéndose permanentemente con la complicidad de los que llegan, sean alcaldes, legisladores, gobernadores.

Heriberto Ruiz Tijerina está convencido que esta es una oportunidad para que el PRI adquiera la mayoría de edad y aprenda a ser un verdadero partido político, con militancia real, auto-financiamiento, practicante de la democracia, con respeto para la carrera, antigüedad, méritos, donde los mejores sean escogidos para desempeñar los cargos y competir en las urnas.

Los mejores, no los recomendados, los parientes de los poderosos, sus amigas, sus socios y cómplices.

Heriberto mismo reconoce que esta es una tarea casi imposible de cumplir, dado que no existe en el PRI la tradición de un partido vinculado con la sociedad pues toda su vida dependió del gobierno, vivió del gobierno, sirvió al gobierno.

Pero la lucha se le está haciendo, a través de una amplia convocatoria para aglutinar a los que quieren ver de pie al PRI dispuesto a valerse por sí mismo para ir por la recuperación de espacios perdidos, con una lucha sostenida a base de ideas, propuestas, proyectos, no sólo con el apoyo de costales de billetes, “como siempre se hizo”.

Sobre el particular, Heriberto Ruiz Tijerina se pregunta con sorna dónde están aquellos poderosos, soberbios y arrogantes “operadores” que presumían de arrasar en elecciones. Eran simples tigres de papel.

Opina el declarante, que este es el momento de iniciar la refundación del PRI, sin esperar a que llegue de arriba la invitación, sino buscando por sí mismos el camino hacia la superación, el ascenso, la recuperación.

También Francisco Chavira Martínez quiere tener su propio partido, pero ya no el PRD al que sacó suficiente jugo (una diputación local para su hermana), sino que tiene puestos los ojos en el Movimiento Ciudadano de Tamaulipas.

Para el efecto, Chavira utiliza los servicios de su prima Roxana Chavira, que fue candidata del Movimiento Ciudadano a alcaldes de Ciudad Mante, pero traicionó esas siglas al aceptar la invitación de su pariente radicado en Nuevo Laredo, para hacer campaña a favor del PAN.

Ahora Roxana y su marido José Luis Martínez Cabriales, también ex militante del MC pues se pintó de azul, montaron un mitote en las puertas del edificio estatal del partido que comanda Gustavo Cárdenas Gutiérrez, exigiendo que les entreguen el manejo de esa organización.

Chavira Martínez tiene una factura por cobrar en la ventanilla del nuevo gobierno estatal, panista, pues repudió la candidatura independiente registrada ante el IETAM para irse a la cargada cabecista, pero quiere llegar además, con un partido político en el bolsillo, para encarecer sus “servicios”.

Sus asesores, sin embargo, no le informaron que no basta con hacer un alboroto para que le adjudiquen un partido (además, el IETAM conoce sus antecedentes penales), y menos picándole las costillas a Gustavo Cárdenas Gutiérrez, que defenderá su franquicia como un león herido.

A propósito de polvos de aquellos lodos, el periodista, escritor, analista, político y operador Jorge Alberto Pérez González, aclara en su más reciente colaboración, que la casilla electoral donde vota el alcalde de Reynosa José Elías Leal, registró una votación a favor de Baltazar Hinojosa, con apenas 8 sufragios de diferencia respecto del candidato del PAN.

Hizo el PRI en Reynosa una campaña intensa, propositiva, seria y contundente, pero no fue suficiente para derrotar la confabulación multi-factorial (¿así se dice?) que se armó para dar lugar a una transición de sobrevivencia, ¿verdad señor Peña Nieto?

Por cierto, vecinos de la colonia “López Portillo”, III, agradecieron al Ayuntamiento de Reynosa los casi 11millones de pesos invertidos en la pavimentación con concreto hidráulico, de casi un kilómetro de accesos.

El alcalde Pepe Elías, síndicos, regidores y funcionarios del gobierno municipal, entregaron la obra que cambió el rostro urbano de la populosa colonia de por el rumbo del Centro Cultural Reynosa, y le dio además un valor adicional a sus propiedades.

Los funcionarios informaron que se emplearon recursos del Fondo de Aportación a la Infraestructura Municipal, FAIM, que incluye cordones, banquetas, tomas de agua y drenaje, así como luces LED, señales de tránsito y nomenclatura.

Por el rumbo de Nuevo Laredo, el alcalde Carlos Cantúrosas Villarreal está rompiendo la tradición de que la proclamación de alcalde electo obligaba al saliente a echarse en la hamaca y dejar hacer, dejar pasar, hasta llegada la fecha de la entrega-recepción.

Cantúrosas presumió que tiene calendarizada su agenda de aquí hasta el último día de su gestión, entregando obras públicas o apoyos para el desarrollo social, sin descansos ni treguas.

Agregó el jefe de la comuna de Nuevo Laredo, que está cumplido el 98 por ciento del programa de obra pública de este año, y que en el curso de las siguientes semanas se concluirán los trabajos en El Laguito, el puente Niños Héroes, la alberca semi-olímpica, el parque industrial Progreso, y todas las demás obras.

Afirmó Carlos que no quedará ninguna obra sin concluir pero además, el nuevo gobierno municipal recibirá una hacienda saneada y con disposición de finanzas.

En la Ciudad de México, Los Chuchos consiguieron retener el control del PRD con la elección de Alejandra Barrales como nueva presidenta del partido. El otro candidato, Pablo Gómez, los hubiera echado por corruptos, por eso le impidieron llegar.

Hoy es lunes de “Reporteros en la mesa”, a las 19:00 horas, en Noti-GAPE de Reynosa, cuadrante 1390, AM, bajo la conducción de Luis Alonso Vázquez.

Y a pesar de que las dificultades económicas hunden a las empresas, especialmente a la editorial, los jóvenes Fernando Díez Piñeyro y Jorge Jácome Guajardo, hacen circular el número 43 de su revista “Hecho en Victoria”, magnífica como siempre, con finos acabados y contenidos intensos.

(Todavía no se inaugura el nuevo gobierno, pero dos periódicos ya “tronaron” en la frontera).

Despedimos la colaboración con condolencias para el colega victorense de la rama deportiva, Jorge Tonche, por el fallecimiento de su hermano. En Matamoros dejó de existir el ingeniero Miguel Rubiano Reyna, ex diputado federal, tesorero en un tramo del sexenio de Manuel Cavazos Lerma.