Así fue la turbulenta relación creativa entre Andy Warhol y Basquiat
El ícono del arte pop, Andy Warhol, nació un día como hoy, pero de 1928. Es reconocido en todo el mundo por su enfoque artístico, aunque no siempre celebrado, pues en su vida (que acabó el 22 de febrero de 1987) enfrentó – y enfrenta – duras críticas sobre sus obras, además de polémicas personales.
En este último ámbito, uno de los casos más conocidos fue su fructífera pero turbulenta amistad con otro gran artista moderno, Jean-Michel Basquiat. Ambos se conocieron a principios de los 80 y forjaron una relación que desencadenó cientos de cuadros, aunque no acabó en muy buenos términos.
Cómo se conocieron Warhol y Basquiat
A finales de los 70, un joven Basquiat llenaba las calles de Nueva York con grafitis bajo el sobrenombre de Samo. Por su parte, Warhol ya gozaba de un lugar privilegiado en el panorama artístico tras haber realizado sus dibujos de la sopa Campbell, cimentado su laboratorio creativo The Factory y colaborado con artistas de otras disciplinas, como The Velvet Underground.
Debido a la influencia de Andy, el joven grafitero estaba deseoso de mostrarle su trabajo. Y lo logró en 1982 gracias al galerista Bruno Bischofberger, quien los presentó. “Él se fue a casa y regresó dos horas después con una pintura, aún fresca, de los dos. Y eso que llegar a la calle Christie Street debió tomarle una hora”, reveló Warhol en sus diarios.
Tras esa primera convivencia, ambos quedaron hipnotizados mutuamente: Warhol por la tenacidad y frenesí del joven artista, y Basquiat por la presencia e impacto de quien declaró que, en el futuro, todos serían famosos por 15 minutos.
Aunque en su momento se rumoró que Andy estaba enamorado del nacido el 22 de diciembre de 1960, nunca se comprobó o testificó algo más allá del respeto, apoyo y admiración que había entre ambos. Lo que sí fue tangible fueron las más de 200 obras que pintaron juntos: Warhol comenzaba el lienzo y Basquiat lo terminaba.
Fin de la relación artística
El declive de la amistad y producción de Warhol y Basquiat comenzó tras la inauguración de la exposición mutua Warhol and Basquiat: Paintings, acontecida el 14 de septiembre de 1985 en la galería Rony Shafrazi, ubicada en Nueva York. Esto debido a que los críticos fueron despiadados con los artistas, lo que hizo que cada uno se replanteara su colaboración. Y así se distanciaron.
La muerte de Warhol, el 22 de febrero de 1987, fue un duro golpe para Jean-Michel, pues no pudo despedirse propiamente de quien lo apadrinó durante casi un lustro. Algunas personas cercanas a ambos artistas expresaron que esta desgracia fue la que hundió en depresión al joven artista, que murió por sobredosis casi un año después, el 12 de agosto de 1988.