Una batalla de ensueño
El campeón contra el primer lugar, el líder goleador en su mejor momento y un estadio que se estrenará en esta celebración, son solo algunos ingredientes que suman expectativa al clásico más pasional del futbol mexicano.
Todavía no se jugaba la jornada previa y el Clásico Regio ya se estaba calentando. La afición rayada cantó “Tienen miedo” y luego el temor se mudó de tribuna. Es el derbi norteño, el que cada temporada ofrece mucho pero esta vez promete no defraudar.
Tigres aún tiene pendiente su juego de Concachampions a mitad de semana, pero las horas para enfrentarse al Monterrey se vuelven más lentas si todo lo que se habla, se vive y se respira en la Sultana del Norte tiene que ver con este encuentro.
Tras la apabullante victoria de 4-1 contra América, los felinos llegan engallados a su cita del próximo sábado en la cancha del estadio BBVA Bancomer contra los albiazules. En tanto los locales están de capa caída por la derrota de 4-0 con Cruz Azul.
Es cierto, estos resultados no son nada a la hora de disputar un clásico, pues ahí solo juegan el honor, la gloria y el orgullo de una ciudad completa, pero sí le ponen un sabor especial a la batalla más pasional del futbol mexicano.
Pero además de estos ingredientes, la edición 106 del Clásico Regio tiene otros factores deportivos insuperables que seguro acapararán las miradas de toda la Liga MX.
El campeón contra el líder
Si ver el campeón en escena es un deleite durante toda la temporada, qué mejor platillo que enfrentar al actual líder de la competencia en un partido clásico.
Ese es el caso del derbi norteño, donde Tigres llegaría como favorito por ser el actual monarca de la Liga MX, pero también Monterrey por ser el de mejor rendimiento en lo que va de la temporada.
De hecho no es la primera vez que se enfrentan en estas condiciones en un Clásico Regio. En el Apertura 2003 cuando Rayados era el vigente campeón, Tigres llegó a la batalla regia como superlíder y venció 3-2 a La Pandilla.
Así que puede ser un buen augurio para los de Antonio Mohamed, que lucharán por demostrar su poderío actual sin importar que en diciembre pasado los universitarios se llevaron el título de la Liga.
El momento Gignac
Con nuevo look y la espada desenvainada, así llegará André Pierre Gignac a su segundo clásico del balompié mexicano, que por vez consecutiva se llevará los reflectores al estar en el primer lugar de la tabla de goleadores.
El francés y actual estrella de la Liga MX acapara las miradas en el campamento auriazul por su capacidad con el esférico y sus celebraciones particulares que demuestran lo acoplado que está en su club Tigres.
Gignac suma ocho goles y buscará subir la cuota cuando estrene el estadio BBVA Bancomer con Tigres, donde desde luego que no será bien recibido ni por la defensa rayada ni por la afición en las gradas.
Las mejores ofensivas
Solo un gol más para Tigres es la diferencia frente a la ofensiva del Monterrey, para ser ambos rivales dos de los punteros de la tabla de goleo por equipos en lo que va del Clausura 2016.
Gracias al excelente acoplamiento de André Pierre Gignac, los felinos tienen 17 tantos sumados en siete jornadas disputadas, mientras que el tridente de miedo de Dorlán Pabón, Rogelio Funes Mori y Edwin Cardona han aportado para 16 goles.
Estas dos ofensivas prometen uno de los mejores clásicos de la historia, que no sería raro que se registren más de un gol por bando. La dura batalla la sostendrán las defensas, que solo aquella que se comporte más frágil será la que llegue a marcar diferencia en el resultado de este duelo.
Casa nueva, derbi nuevo
Desde su apertura, el estadio BBVA Bancomer tuvo que esperar 216 días para celebrar su primer Clásico Regio, algo que sin duda augura una fiesta total desde el momento en que llegue a abrir sus puertas.
Luego de decenas de ediciones en el Tecnológico, Rayados se estrenará como anfitrión de un derbi en su nuevo estadio. Los pasillos, las gradas y sobre todo la cancha del inmueble al pie del Cerro de la Silla quieren escribir sus propias memorias.
Las autoridades del Club Monterrey y también las municipales ya preparan operativos de seguridad que brinden las garantías para los 53 mil 500 aficionados que se den cita en esta histórica contienda; porque eso es lo único seguro, que el coloso de La Pastora lucirá pletórico de rincón a rincón.
Tan solo el gobierno de Guadalupe contempla la presencia de 300 policías, 120 tránsitos, 21 elementos de protección civil, más de 50 unidades viales, inspectores de comercio y seis unidades de la Cruz Verde.