UNA VOZ DE SU TIEMPO
Este fin de semana rindió su informe de labores la presidenta del DIF Altamira Alma Laura Hernández Amparán.
Y es relevante destacar que en este organismo del sur de la entidad se están haciendo las cosas muy diferentes y mejor que en años anteriores.
¿Por qué digo lo anterior? Porque con datos duros nos podemos dar cuenta que la inversión del ayuntamiento de Altamira al sistema DIF Municipal asciende a 300 millones de pesos.
Por lo que basados en esa inversión se puede decir que el DIF Altamira es el organismo de este tipo en Tamaulipas que mayor presupuesto destina a este rubro.
Son datos duros, irrebatibles, no propensos a la duda, ya que se constata de manera contundente que en este municipio del sur de la entidad las acciones para apoyar el desarrollo integral de la familia son una prioridad.
Las acciones han sido de corte multidimensional beneficiando a 103 mil 455 personas, una cifra que demuestra con hechos que las acciones por la familia altamirense son una política pública al más alto nivel.
Las acciones del DIF Altamira presidido por Alma Laura Hernández Amparán pasan por la modernización de la clínica de este sistema integral para la familia en donde se instaló un quirófano, por el Centro de rehabilitación Integral, dos guarderías, 124 clubes comunitarios y dos Casas del Adulto Mayor, entre otros importantes renglones.
De esa manera, lejos de las grillas baratas, es que el DIF altamirense se colocó en el ámbito estatal en el de mayor inversión para beneficio de la ciudadanía, teniendo en la joven Alma Laura Hernández una voz de su tiempo.
Y ya que andamos por esa zona de Tamaulipas hay que decir que los Morenos siguen tratando de convencer, al que los quiera escuchar, de que ellos van a quedarse con el gobierno municipal altamirense.
Y como si tuvieran una bola de cristal adivinadora, dan por hecho que tomarán por asalto palacio municipal. Y es que Armando Martínez Manríquez, ex candidato de la coalición Juntos haremos Historia, no acepta su derrota en las urnas.
Me llama la atención que los de MORENA cuando hablan de pueblo siempre lo hacen en su muy particular interpretación.
El “pueblo” para los de MORENA es la masa reunida en las plazas y calles bajo la convocatoria de ellos, y claro tomando como buenas las ideas de este partido político. No se salen de ahí, de una concepción poco convincente y bastante pobre.
En cambio, para el resto de los ciudadanos, “el pueblo” es la voz del ciudadano a través del voto depositado en las urnas. Y esto ya sucedió en el mes de julio en todo México. Altamira no fue la excepción… ahí hablo el pueblo con su voto.
Querer ganar una elección en la mesa y no en las urnas es un retroceso, porque además las presuntas quejas carecen de sustento ya que son solamente apreciaciones personales de unos cuantos.
Dejarle el ejercicio del presupuesto público a Armando Martínez Manríquez en Altamira (en el hipotético caso de que ganaran en la mesa) sería como poner a Drácula a administrar un Banco de Sangre.
¿Por qué? Porque a lo largo de los años él ha dado constancia de querer estar siempre entre los algodones del presupuesto público.
Lo recuerdo muy bien en sus viajes a Nuevo Laredo cuando uno de sus compañeros priístas llegó a ser alcalde. Armando Martínez, trascendió, era proveedor de ese ayuntamiento.
La ideología política de Armando Martínez Manríquez no ha sido de derecho, centro o de izquierda como ahora pretende hacerlo creer, no, su ideología tiene que ver más con el pragmatismo político de “primero yo y después yo”.
Es decir, arriba, a un lado, en el centro, abajo, como sea, pero siempre dentro de la jugada gubernamental. ¿En realidad eso es lo que se quiere para Altamira? Estoy seguro de que no.
MAQUIAVELITO
…Ahora, los simpatizantes de Magdalena Peraza Guerra, alcaldesa de Tampico hasta el 30 de septiembre de este año, dicen que ella será candidata a diputada local el próximo año.
Caray, su gobierno fue despótico y fue rehén de sus íntimos deseos, además de perder la reelección en las urnas. ¿Aún así la quieren de diputada local? ¡Ya no entiendo!