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Se deslindan gobernadores de oposición de Javier Corral

El gobernador con licencia de Nuevo León y aspirante a una candidatura independiente a la presidencia, Jaime Rodríguez el “Bronco”, se convirtió en las últimas horas en el último de una serie de gobernadores y funcionarios locales, opositores al PRI, en desmarcarse del mandatario de Chihuahua.

Antes de El Bronco, los gobernadores panistas de Querétaro y Veracruz, el mandatario perredista de Michoacán, el gobierno blanquiazul de Baja California Sur, además del Sistema Nacional Anticorrupción, rechazaron sumarse a la cruzada de Corral y salieron aclarar de su buena relación con el Gobierno federal.

“Nadie, ningún gobernador, tenemos problemas con el presupuesto; se me hace que él quería de más, probablemente no supo negociarlo con la Federación”, dijo Rodríguez, entrevistado en Zacatecas.

El pasado 8 de enero, Javier Corral ofreció conferencia de prensa celebrada en la ciudad de México, a donde viajó expresamente desde Chihuahua, y en la que se hizo acompañar por líderes de la Coalición por México al Frente, activistas e integrantes del Sistema Nacional Anticorrupción.

Corral acusó entonces que el gobierno que preside ha sido castigado por el gobierno federal, al presuntamente retenerle recursos federales por 700 millones de pesos, cuya entrega extraordinaria había convenido con Hacienda, como represalia –según su dicho- por la investigación sobre presunto desvíos del ex gobernador César Duarte al PRI.

Pero con el transcurso de los días las aseveraciones de Corral sobre que el gobierno federal retiene recursos a opositores fueron puestas en duda no sólo por el gobierno federal y el PRI, sino también por gobernadores y funcionarios estatales de alto nivel del PAN y PRD.

El gobernador de Veracruz, el también panista Miguel Ángel Yunes Linares, fue uno de los primeros lugares en negar haber recibido presión alguna.

“Tenemos una muy buena relación con el gobierno federal, nunca hemos tenido de su parte ninguna prohibición por las acciones que llevamos a cabo en contra de Javier Duarte”, expuso Yunes Linares.

En el mismo sentido, tras las acusaciones de Corral, el gobernador panista de Querétaro, Francisco Domínguez, expresó que en su calidad de coordinador de la Comisión de Hacienda de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) nunca ha recibido quejas de otros mandatarios por incumplimiento en las transferencias de recursos del gobierno federal.

“Nunca, en ningún momento, ningún momento, ningún gobernador, ha tenido un acercamiento o ha habido terrorismo, si es de un partido o de otro, a favor o en contra de los ingresos que debe recibir cada estado o entidad federativa por parte de la Secretaría de Hacienda”, dijo Domínguez.

Entrevistado al término de un evento en Los Pinos, el panista de Querétaro dijo que Corral tendrá que explicar si los 700 millones de pesos los pidió por algo especial o para cierre de su ejercicio.

“Porque todos vimos que es un estado que recibió un déficit real, pero cada quien tiene que componer su déficit, no es obligación de la Federación ni de Hacienda recomponer el déficit de los estados”, dijo Domínguez.

Uno más. El titular de la Secretaría de Finanzas de Baja California Sur, Isidro Jordán Moyrón, escribió en sus redes sociales que ni el gobierno estatal encabezado por el panista Carlos Mendoza Davis, ni él en su calidad de Coordinador de la Comisión Permanente de Funcionarios Fiscales “hemos recibido presión o condicionamiento alguno” por parte de Hacienda para entregarnos los recursos que por ley nos corresponden.

Además de los gobiernos estatales panistas, perredistas e independientes, recientemente se deslindó de Javier Corral el Sistema Nacional Anticorrupción, quien lo había acompañado en su conferencia de prensa del lunes.

“Lo que pasa es que esto ya ha derivado en una cosa mucho más política… y en eso sí, pues tanto como yo como el Comité de Participación Ciudadana ya nos alejamos”, dijo Jacqueline Peschartd, presidenta del referido Comité.

El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, también emanado de un partido del Frente, el PRD, lo resumió así: “El Gobernador de Chihuahua vende fantasmas, quizás quiera ser secretario de Gobernación.. es evidente lo que busca este personaje y así ha sido toda la vida de provocador”.

Y mientras para muchos Corral sigue haciendo política partidista, a nivel local Corral sigue recibiendo críticas por no poder controlar la ola de asesinatos en Chihuahua, que tan solo en un fin de semana dejó 32 muertos, así como por el manejo del asesinato de la periodista Miroslava Breach.

La familia de la comunicadora acusó esta semana a la Fiscalía de Chihuahua de negar el acceso a la investigación por lo que solo la dependencia conoce el contenido de la carpeta.

La organización Propuesta Cívica y los familiares de Breach declararon que desconocen porque la Fiscalía de Chihuahua desvinculó de la investigación el factor político del caso y lo relaciona con la delincuencia organizada.

Y para rematarla, hoy varios diarios de circulación nacional recuerdan en un desplegado que durante lo que va de su administración, más de 2400 personas han sido asesinadas en Chihuahua