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ALTAMIRA; LA CONSPIRA

En Victoria, ahí por las esquinas del poder, entre el 15 y el 16 Juárez e Hidalgo han comenzado a levantar las cejas ante las señales que llegan desde Altamira, municipio que en el papel gobierna el PAN, pero que en la práctica comienza a dar tonos tricolores y naranjas y el pronóstico es que eso terminará en un rompimiento con el color de los vientos del cambio.Así es mis queridos boes, Altamira municipio en el que manda Juvenal Hernández Llanos, ex alcalde priista y cuya autoridad formal es su esposa Alma Laura Amparan, es desde ya refugio de un venido a menos grupo de tricolores, quienes presumen van por la reelección de la actual alcaldesa, pero bajo el cobijo del PRI, el Movimiento Ciudadano y partiditos que se les sumen, pero no más por el PAN.

En lo que antes se conocía como el sólido sur, la relación de negocios y afinidades políticas de Juvenal Hernández y de Fernando Azcárraga (al que se le acabó el mote de invencible hace ya un rato) es harto conocida.

Bueno pues desde esa dupla, habría comenzado a gestarse el movimiento para que las huestes tricolores regresen al poder oficialmente, porque de hecho están empoderados gracias al cobijo del PAN.

A la carrera por la reelección se han sumado algunos panistas que pronto fueron convencidos de dos cosas: Una, que Alma Laura Amparan ganó solo por su esfuerzo, que porque la campaña estatal panista en el sur solo se enfocaba a Tampico y que fue gracias a Juvenal y compañía, además de su carisma que ahora es alcaldesa y dos: que desde Victoria les impedirán que ella vuelva a ser la candidata en el 2018, por lo qué hay que fortalecer desde ahora su imagen y arrebatar la estafeta dentro de dos años o irse por una coalición encabezada por el PRI.

Ahí están personajes como José Alberto Guzmán, que funge como Coordinador General de la Presidencia que apuesta a que Alma Laura repetirá en el 2018 y para ello ya están trabajando.

Guzmán era hasta hace unas semanas un férreo defensor de la causa panista, pero todo hace suponer que se sumó al proyecto de ruptura, convencido por el cargo municipal que le permite moverse como el jefe del gabinete, el que toma las decisiones, el que quita y pone; al menos en teoría.

Al proyecto por Altamira para los del PRI, se sumó además la semana pasada Francisco Piñeiro, patrocinado por Fernando Azcárraga del que fue jefe de
prensa y que ya ocupa el mismo puesto en la administración altamirense de Alma Laura Amparan.

Piñeiro además de vocero de Azcárraga lo fue de la Comapa conurbada cuando esta era manejada por el priista Francisco Bolado.

Es decir Azcárraga llegó con todo y su gente, pronto llegará incluso con el Movimiento Ciudadano que en Tamaulipas mangonea Gustavo Cárdenas y con el que el dos veces alcalde de Tampico ya está en pláticas para sumarse.

En pocas palabras juntarían el peso de Juvenal Hernández en el PRI y el de Azcárraga que comprará parte de la franquicia del Movimiento Ciudadano.

¿Cortarán con el PAN?, ¿en verdad creen que ellos ganaron por encima del efecto Cabeza de Vaca que arrasó hasta en municipios como ese en los que se hizo poca campaña por los candidatos a alcaldes?, ¿les alcanzará para que en menos de año y medio logren posicionarse y enfrentar si es que se van del azul una campaña que tenga el apoyo desde el grupo que gobierna Tamaulipas?

Además, si la teoría de la conspiración es cierta, habría que preguntarse y preguntarle a Miguel Gómez Orta hacia dónde se decantaría, porque por un lado debe lealtad al gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca quien lo anunció como representante de su gobierno en el sur; aunque el ayer dijo que aún no tiene nombramiento o del lado de su tía Alma Laura Amparan, lo que le regresaría a las filas del PRI.

En qué va a parar esa novela, quién sabe, lo que si insisto es en que desde Victoria ya tienen la lupa bien puesta en Altamira, porque desde luego que en el equipo azul no están nada dispuestos a dejar ir una plaza que ganaron con amplio margen y que estratégicamente por temas de inversión y desarrollo económico les interesa sobremanera conservar.

Borran a los Torre…
El ejemplo podría cundir; el caso es que en Madero, donde gobierna Andrés Zorrilla, el Cabildo aprobó que todas las áreas públicas que lleven nombres de la familia del ex gobernador Egidio Torre Cantú sean cambiados por los originales.

De tal suerte que la Avenida Rodolfo Torre Cantú volverá a ser la Avenida Tamaulipas, el Complejo deportivo Egidio Torre López (padre del ex gobernador) se llamará Polideportivo Miramar y así.

No se trata de un asunto político, reiteró el alcalde Andrés Zorrilla, sino de un tema de identidad, de regresarle la identidad a lo que es de los maderenses.

El presupuesto de Victoria…
Ayer el Cabildo de Victoria aprobó, entre otras cosas, el presupuesto de egresos del año entrante en el que hay que resaltar que a pesar de los pronósticos económicos para el país nada halagüeños, se establece un incremento en 25 millones respecto al que se ejerció este año.

Es decir que el Alcalde Óscar Almaraz Smer invertirá 838 millones en obras, servicios y programas para de tipo social para la capital del Estado. Buena para el alcalde, ha demostrado que se le da lo de la gestoría y que en lugar de quejas y lamentos le entra a la chamba.

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Por: MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA